El PP asegura que el bus urbano ha perdido en Lugo 77.000 usuarios en dos años
Los lucenses no somos mucho de perder nuestras pertenencias.
De hecho tenemos un montón de cosas desde hace más de dos mil años que ni siquiera hemos encontrado todavía. O sea que, perderlas, ni te cuento.
Más bien se nos reconoce por ser gente bastante centrada, metódica y cuidadosa.
Por eso me extraña tanto la noticia.
¿Cómo es posible que se hayan perdido en nuestros autobuses 77.000 usuarios?
¿Qué es esto, el Triángulo de las Bermudas?, ¿un agujero negro?
Además, con los recorridos que hacen, ¿por dónde los pierden?.
¿Tendrán agujeros los autobuses en el suelo y se irán cayendo durante los trayectos; o se tirarán por las ventanillas, "motu proprio", entre parada y parada?.
Y, lo más curioso, ¿dónde están; no hay nadie que los reclame?
Yo creo que 77.000 viajeros no se pierden ni en Tokio, que multiplica por más de 200 la población lucense, con todo ser más fácil perderse allí, porque todos son japoneses y tienen los ojos de aquella manera que no hay forma de distinguirlos y si los recuentas, pasas al mismo dos o tres veces y ni te enteras.
Tu ves un autobús de japoneses y no sabes si faltan cinco o diez, entre otras cosas porque van trescientos a caballo unos de otros y aplastados contra las ventanillas; en cambio en uno de Lugo, sabes si falta el del bigote, el cojo, la señora mayor o el chaval que va con sus rastas. Es otra cosa. Se controla mejor.
A la hora de poner remedio a esto, solamente se me ocurre que aten a los viajeros unos a otros, como los chorizos; así les será más complicado perderse por separado. O se pierden todos juntos, o no hay forma.
De todos modos, si se han perdido 77.000 personas, del censo capitalino solamente quedarán unos 20.000 habitantes, mal contados; por ello no va a ser necesario adoptar medidas ya que en el primer semestre del año ya se perderán los que quedan y sobrevivirán como únicos habitantes de la ciudad, los conductores de los buses que los han perdido.
Si no se pierden ellos también, claro.